Uno de los primeros servicios que se popularizó en la nube, para el usuario medio, fue el almacenamiento de archivos. Seguro que si te pregunto por la primera vez que oíste hablar (o usaste) Dropbox (o similares) me vas a responder que hace bastantes años.
Normalmente los clientes de escritorio de este tipo de servicios suelen ser un sincronizador de ficheros, es decir, instalas la aplicación en tu ordenador, eliges una carpeta y todo el contenido de esa carpeta se sincroniza con el contenido que tienes en dicho servicio. Lo cual puede estar bien en un primer momento, pero hay veces que… no tanto.
Buscando otras alternativas a los clientes convencionales, hace tiempo que encontré Mountain Duck. La principal diferencia entre el cliente (para usuarios no empresariales) de Dropbox, Google Drive… o tu servicio preferido es que, en lugar de sincronizar una carpeta del sistema con el servicio, convierte el almacenamiento del servicio en cuestión en una unidad más de tu equipo.
De una forma más sencilla: esta aplicación le hace creer a tu ordenador que tu cuenta de Dropbox es un pendrive y puedes acceder al contenido directamente, sin tener que andar sincronizando todo… una especie de Netflix/YouTube de ficheros.
Realmente la interfaz es muy sencilla… porque tampoco necesitas más. Tiene una ventana de preferencias en la que puedes configurar algunas opciones del comportamiento general de la aplicación, gestionar algunos ajustes relativos a Amazon S3, que canal (estable, beta…) quieres usar para actualizar automáticamente la aplicación o escoger que idioma quieres usar para la interfaz de usuario.
Aunque hasta ahora he hablado siempre de Dropbox (creo que es de los servicios más populares) la verdad es que la magia de Mountain Duck no se limita a este servicio. Puedes utilizar la aplicación para conectarte a:
- Amazon S3
- Azure Cloud Storage
- Backblaze B2
- Dropbox
- Google Drive
- Google Cloud Storage
- OneDrive
- OpenStack Swift
- Servidores FTP
- Servidores SFTP
- Servidores WebDAV
La verdad es que la lista de opciones está bastante completa y no se deja (casi) ninguna opción, de las principales, sin tocar.
Una vez has configurado los diferentes servicios/servidores que quieres usar el uso es muy simple. Pulsas en el icono que se encuentra junto al reloj, eliges el servidor o servicio al que quieres conectarte y… pulsas en conectar. En unos segundos verás que tienes una nueva unidad en tu equipo que se corresponde con el servicio o servidor que has elegido.
A partir de ahí ya puedes utilizar los ficheros que guardas en tu servicio/servidor favorito como si estuviesen guardados en tu disco duro interno: utilizar el explorador de ficheros para navegar por las carpetas, abrir los ficheros con las aplicaciones correspondientes, crear/borrar nuevos ficheros/carpetas… Por supuesto, la experiencia depende de la velocidad de tu conexión a internet.
En las semanas que llevo utilizando la aplicación la verdad es que la experiencia ha sido bastante positiva:
- Utilizando el explorador de Windows no he tenido problemas más allá de algún pequeño retraso a la hora de visualizar carpetas con un número bastante alto de imágenes. Recordemos que Windows, por defecto, genera miniaturas de los ficheros de imagen. Si esas imágenes están en local el tiempo de generación de las miniaturas es casi imperceptible, pero al tratarse de imágenes en remoto se pueden llegar a dar estos retrasos. Aún así nada importante.
- Utliizando el explorador de ficheros de alguna aplicación se me ha quedado pensando al intentar visualizar alguna carpeta. Como si la aplicación no fuese capaz de llegar a ciertos niveles de subcarpetas. En esas ocasiones he abierto el fichero que necesitaba desde el explorador de Windows y todo ha funcionado a la perfección… así que tampoco lo considero problema de Mountain Duck al 100%.
- La velocidad de transferencia de ficheros ha sido todo lo buena que podría esperar. OJO! Tienes que tener en cuenta que estás visualizando/utilizando ficheros remotos, así que la velocidad depende, en gran medida, de la velocidad del servidor donde están alojados y de la velocidad de tu conexión.
- Si utilizas una cuenta de Google Drive o Dropbox (por ejemplo) seguro que vas a descargar/ver los ficheros a toda la velocidad de tu conexión a internet.
- Si quieres ver los ficheros de un servidor que tienes en la oficina (vía SFTP por ejemplo) igual estás limitado por la velocidad de subida de la conexión que tenga dicho servidor.
- Si estás conectado con una conexión de fibra todo irá mucho más fluido que si estás conectado a la WiFi de un recinto/evento… o si estás usando tu móvil como punto de acceso.
Teniendo en cuenta las limitaciones mencionadas creo que Mountain Duck es una gran aplicación, totalmente recomendada, para el objetivo que se ha creado.